El Mercurio, en un reportaje publicado este lunes 5 de diciembre de 2022, destaca que en menos de una década la matrícula en programas de formación continua se multiplicó por 50, y la oferta de cursos se elevó hasta en cinco veces. La flexibilidad que ofrecen explicaría su éxito, señala el diario.
La publicación, de la periodista Margherita Cordano, destaca el pionero papel que cumplió Teleduc UC. Este programa llevó la educación a distancia a través de la televisión de manera muy exitosa, a partir de 1976.
A casi 50 años de ese hito, la llegada de internet y las plataformas en línea han hecho crecer la oferta de educación remota. En la UC, agrega, de los 205 diplomados que ofrecían en 2012, 14 eran en modalidad online, mientras que otros 33 eran semipresenciales. Sumaban poco más de 1.000 alumnos. En 2019, la matrícula de este tipo de educación en línea llegó a las 58 mil personas, subiendo a 82 mil en 2020 y a más de 122 mil el año pasado. Para 2024, la proyección es que se sobrepasen los 150 mil estudiantes.
Formación continua online y transformación digital
“Durante los últimos años se ha acelerado la transformación digital en educación continua con la creación de cada vez más diplomados online. Sin embargo, no fue hasta el año 2020 donde producto del confinamiento, se produjo la explosión de la educación online y la aparición de nuevas modalidades educativas, como el formato online con clases en vivo”, manifiesta Luz Montero, directora de Educación Continua UC.
“Debido a la crisis sanitaria del 2020 se reconvirtieron la mayoría de las actividades presenciales al formato remoto, las que sumadas a
los programas en la modalidad full online representaron el 89% de todas las actividades de educación continua. Esta tendencia se consolidó el 2021 y se mantiene hasta ahora, donde más del 95% de los programas son en formatos online (asincrónicos), remotos (sincrónicos) o híbridos (que combinan lo virtual con algo de presencialidad)”, dice en el citado artículo.
Asimismo, Luz Montero señala que más allá de los confinamientos, en la expansión de cursos y diplomados online habrían influido “los aportes fiscales y los retiros de fondos de pensiones” y la consolidación de la modalidad virtual: “La pandemia derribó muchos mitos y aprensiones sobre la educación online”, explica.
En el reportaje también participan representantes de la UAI, UTEM, UNAB y UDP.
Lee el reportaje completo aquí: Tras su auge en pandemia, los programas de formación continua online siguen creciendo